Redacción: El Periodista Foto: Internet
Un terremoto de magnitud 6.6 sacudió a la provincia de Sichuan, en el suroeste de China, el pasado lunes. Según las autoridades locales, la profundidad fue de 10 kilómetros y causó al menos 50 personas fallecidas y más de 250 centenar de heridos y desaparecidos
El terremoto registrado a es o de la 1 de la tarde, hora local, dejó 11000 personas evacuados, debido a posibles deslaves y derrumbes de edificios, así como numerosos daños en edificios e infraestructuras y plantas hidroeléctricas.
El epicentro se situó en el condado de Luding, una zona de valles, ríos impetuosos y carreteras estrechas situada en los lindes de la meseta del Tíbet, a unos 200 kilómetros al oeste de la capital provincial Chengdu.
De acuerdo con los reportes de las autoridades locales, las labores de búsqueda y rescate continúan, por ello, desplegaron a 6,500 personas como parte de los equipos de rescate y de ayuda para la remoción de escombros en carreteras.
Sichuan, una provincia de 84 millones de habitantes, ya enfrentaba un verano muy desafiante antes del poderoso terremoto. En los últimos dos meses, la provincia ha soportado una sequía y las peores olas de calor en 60 años.
El año pasado, un terremoto de magnitud 6 golpeó Sichuan, y dejó tres personas muertas y 60 heridas, según los medios estatales en ese momento. Mientras que, en 2008, un terremoto de 7.9, dejó centenares de personas fallecidas y las réplicas se sintieron en ciudades a más de 1,450 kilómetros de distancia.