San Salvador. – Según la Organización Mundial de la Salud, las personas de todo el mundo que padecen problemas de salud mental se enfrentan a la discriminación.
“Todo el mundo debería tener derecho a vivir una vida con dignidad, equidad, igualdad y respeto, y esto incluye a las personas con problemas de salud mental. Sin embargo, en la Región de las Américas continúan persistiendo el estigma, la discriminación y las violaciones de derechos humanos”, cita el organismo internacional en su sitio web.
Y es que, en muchos países de la Región, a menudo las personas con problemas de salud mental no tienen acceso a servicios de calidad, son sometidas a prácticas coercitivas, tratos inhumanos y, en algunos casos, abusos, incluso en entornos de atención de salud, donde deberían ser protegidas.
Los países deben promover iniciativas regulatorias y normativas para apoyar la salud mental como un derecho humano universal. Al mismo tiempo que limitan las prácticas que favorecen las violaciones de derechos humanos.
Esto incluye el establecimiento de leyes de salud mental que respeten los principios de los instrumentos internacionales de derechos humanos, como la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) y la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH).
De acuerdo con la OPS/OMS, las estimaciones regionales muestran que poco más del 60% de 39 países tienen una ley de salud mental independiente, y casi la mitad de 37 países carecen de una autoridad dedicada a evaluar el cumplimiento de los instrumentos internacionales de derechos humanos, o la que existe no está funcionando.
La OPS sigue comprometida a trabajar junto a los países, brindando apoyo técnico para desarrollar legislaciones de salud mental que cumplan con las convenciones internacionales y abogando por los derechos de cada individuo, más allá de fronteras y desigualdades.
El Día Mundial de la Salud Mental fue iniciado en 1992 por la Federación Mundial para la Salud Mental y desde entonces ha cobrado impulso a medida que más personas toman conciencia de lo esencial que es una buena salud mental para el bienestar general de una persona.
Fuente: OPS/OMS.